2011 Mario Gómez conquistó la corona de goleador. En esta entrevista, el jugador de 38 años habla de sus inicios futbolísticos en su patria suaba, de su gol más importante y de un rival que fue una pesadilla para él.
¿En qué club empezó a jugar?
En casa, con el SV Unlingen. Entonces tenía cinco años.
¿Ya era goleador de niño?
Sí, desde luego. Para mí, todo fue marcar goles desde el principio. Nunca jugué en otra posición. Siempre estaba delante.
¿Tuvo algún modelo a seguir?
El ídolo de mi infancia era Jay-Jay Okocha. Su forma de manejar el balón me fascinaba. Era como un artista.
¿Cuál fue su gol más importante?
El más importante para mí personalmente y el que más recuerdos me trae fue mi primer gol internacional. También fue mi primer partido internacional, contra Suiza en 2007. Fue un debut casi perfecto, ganamos el partido por 3:1.
¿Quién fue su mejor compañero de equipo?
David Alaba. Su conjunto en general me impresionó, incluso siendo joven aportó mucho y luego se desarrolló de forma excepcional. Para mí, no tiene puntos débiles. Domina todo el programa.
¿Cuál ha sido su mejor rival?
Indiscutiblemente Carles Puyol, el veterano jefe defensivo del FC Barcelona y de la selección española. Era una bestia, un monstruo. Al principio de nuestros duelos pensé que nos veríamos como hermanos, yo con mis raíces españolas. Pero en el campo era alguien que lo daba todo por su equipo. Como rival directo, 90 minutos contra él eran una pesadilla.
¿Qué portero rival fue el mejor?
Manuel Neuer y Petr Cech. Ambos fueron maestros en su oficio.
¿Cuál era su punto fuerte?
Es obvio: los goles. Con diferencia, mi mayor punto fuerte y lo que me ha mantenido ocupado toda mi carrera. No hay nada en lo que haya pensado tanto.
¿Cuál es su punto débil?
Durante mi carrera en activo, desde luego no era uno de los jugadores con mejor capacidad para correr. Por eso tuve que administrar bien mis fuerzas y, sobre todo, cuidarme de estar ahí mentalmente cuando marcaba el gol y de meterlo (risas).
¿Quién es el mejor goleador de todos los tiempos?
Indiscutiblemente Lionel Messi. Aunque siempre fui fan de Ronaldinho, Rivaldo o sobre todo Romario. Pero Messi ya está en una liga propia.
¿A qué club aficionado sigue vinculado?
Mi primer club, el SV Unlingen.
¿Aún da patadas de vez en cuando?
Cuando, entonces con mi hijo. Si no, sólo cuando surge algo realmente especial. En el partido de despedida de Claudio Pizarro en Bremen, volví a ponerme las botas de fútbol por primera vez desde que me retiré.
¿En qué posición se encuentra su corona de goleador?
Será mejor que no quiera saberlo (risas).