En Heidenheim, el técnico Thomas Tuchel dio descanso sin necesidad a los centrales Matthijs de Ligt y Eric Dier, y sus suplentes le decepcionaron. En el caso de Min-Jae Kim, la cuestión ahora es si se trata de falta de confianza o de la clase necesaria
Por supuesto, esta derrota innecesaria pero en cierto modo típica del Bayern es culpa de todo el equipo. Ya no personifican nada de lo que durante años se consideró típico del FC Bayern. Falta clase, falta confianza, falta frialdad y falta soltura. Por lo tanto, una ventaja de 2-0 ante un equipo ascendido como el Heidenheim no es garantía de victoria, como el FC Bayern aprendió dolorosa pero merecidamente el sábado por la tarde
Y sin embargo, una razón de peso para el colapso en Heidenheim reside en la defensa central. Dayot Upamecano y Min-Jae Kim fueron considerados durante mucho tiempo como el dúo favorito de Tuchel, pero ahora demostraron una vez más por qué ya no lo son. La tendencia de Upamecano a cometer errores no es nada nuevo; en Heidenheim, fue especialmente culpable del primer gol encajado. Kim, por su parte, se equivocó por completo en el 2:2, al perder de vista al goleador Tim Kleindienst. También se equivocó en el 2:3
¿Consecuencias para los cuartos de final de la Liga de Campeones?
Es sorprendente a la vista del currículum del surcoreano, elegido mejor defensa de la Serie A la temporada pasada. Es decir, la liga que ha elevado la defensa a la categoría de arte. En Múnich, el jugador de 27 años ha podido confirmarlo en demasiadas ocasiones. A menudo llama la atención su falta de instinto para tomar la decisión correcta: ¿Cuándo se trata de defender resueltamente hacia delante? ¿Y cuándo sería mejor replegarse y proteger? En Heidenheim, Kim se mostró muy desconcertado tras una sólida primera parte en la que encajó el primer gol.
Por tanto, la única conclusión para el partido de ida de cuartos de final de la Liga de Campeones, el martes en el campo del FC Arsenal, puede ser que Tuchel volverá a apostar por Matthijs de Ligt y Eric Dier. Sin embargo, el relevo de Kim no debería romperse definitivamente. No sería el primer profesional que da con la tecla en sólo su segundo año en el FC Bayern. Sin embargo, para ello deberá mejorar enormemente su rendimiento