Ass La Roma no termina de coger el ritmo, y no del todo. Tras la ajustada y medio regalada victoria por 1-0 ante el Torino entre semana, ahora ha sufrido una innecesaria derrota por 2-3 ante el Hellas Verona. El aire está enrarecido para el entrenador Ivan Juric
El domingo por la noche, el Roma tuvo algunos buenos momentos en su visita al Hellas Verona, en busca de su segunda victoria consecutiva en liga. Por ejemplo, en el minuto 28, cuando Soulé, que saltó al terreno de juego en sustitución de Dybala (en el banquillo), remató de tacón un centro de Zalewski para dar al Roma un merecido empate a uno.
Antes de eso, sin embargo, Zalewski había intentado una desastrosa jugada lateral, que el delantero del Hellas Tengstedt interceptó y realizó libre de marca ante el guardameta del AS, Svilar, para dar a los modestos un sorprendente 1:0 (13′).
El partido siguió más o menos por los mismos derroteros: en el minuto 34, el corpulento Magnani, del Verona, se elevó por encima de todos en el área de cinco metros y cabeceó a bocajarro para hacer el 2-1. Tras la reanudación, Dovbyk hizo el 2:2 y los romanos presionaron con todo para lograr el 3:2. Harraoui se zambulló y marcó el gol de la victoria, que todo el banquillo de suplentes del Verona saltó al campo para celebrarlo.
Hummels de nuevo sin minutos
Caras largas, muy largas para el equipo capitalino, que sufrió su cuarta derrota de la temporada en esta undécima jornada de la Serie A y se atasca en la zona media de la tabla con escasos 13 puntos y una clara distancia con la cabeza
El aire se ha enrarecido aún más para el técnico Ivan Juric, que ha ido de decepción en decepción desde la sorprendente destitución de Daniele de Rossi, hace tiempo que los medios de comunicación dan por descartado al equipo y ha vuelto a fallar a la hora de convocar a Hummels.