Al Manchester City le vendría muy bien Kevin De Bruyne en estos momentos. Pero el camino para recuperar su antigua fuerza es rocoso – mientras que las conversaciones contractuales parecen estar en punto muerto
Kevin De Bruyne llegó a jugar en el Manchester City cuando Pep Guardiola aún era entrenador del Bayern. Pero es probable que haya vivido por primera vez una situación como la del sábado: sustituido en el tramo final, con el marcador a 0:3. Al mismo tiempo, fue una de las pocas escenas de la paliza contra el Tottenham que dio a los seguidores del Man City un poco de esperanza.
Después de todo, un De Bruyne en forma sería uno de los anclajes que el vigente campeón necesita desesperadamente tras cinco derrotas seguidas. Desde «lo de Brentford», como él mismo lo calificó el lunes, el mediapunta ha estado luchando contra el dolor. Entonces, el 14 de septiembre, sufrió una lesión en los flexores de la pierna que, en contra de lo esperado, no le supuso un parón forzoso de varios días, sino de semanas.
Apenas pudo disparar, «fue muy frustrante». Pero ahora, desde el viernes concretamente, se acerca a su primera titularidad en dos meses y medio. «El día antes del partido contra los Spurs dijo que era el primer día que se sentía en forma», reveló Guardiola, y De Bruyne lo confirmó: “Mejoró el viernes, no puedo explicarlo. ”
«Si no hay conversaciones, será mi último año aquí »
El partido de Liga de Campeones del martes en Feyenoord debería ser más largo que contra el Tottenham. Y entonces las conversaciones sobre el contrato, que De Bruyne ha dejado en suspenso desde su contratiempo físico, podrán reanudarse pronto. Mientras Guardiola ha puesto fin a las conjeturas en torno a su futuro, el del belga de 33 años sigue abierto.
«Sinceramente, no lo sé», respondió cuando se le preguntó cuándo espera nuevas negociaciones. «No estoy demasiado preocupado, no hay prisa. Sólo quiero volver a jugar bien al fútbol. Si no hay conversaciones, será mi último año aquí, pero no lo sé». A diferencia de Mo Salah, que aparentemente casi tiene que rogar a los jefes del Liverpool para que le hagan una oferta, a De Bruyne se le permite «decidir por sí mismo lo que es mejor para él y para el equipo», subrayó Guardiola. «Depende de él».
En la temporada anterior, De Bruyne marcó seis goles y dio 17 pases de gol en sólo 20 partidos, pero tampoco pudo jugar más a menudo debido a las lesiones. No se puede descartar que ambas partes prefieran reorientarse en verano. A corto plazo, sin embargo, tiene el mismo objetivo que el Man City: «Quiero volver a ser yo mismo. »