Quien llega tarde, la vida lo castiga, o Hansi Flick. Jules Koundé fue expulsado del once titular por tercera vez. El portero Inaki Pena también pagó caro unos minutos.
Desde esta temporada, se ve una y otra vez a jugadores del Barcelona corriendo apresuradamente hacia el campo de entrenamiento o hacia el autobús del equipo. Prueba de ello es un vídeo de Ronald Araujo, difundido en las redes sociales, en el que se le ve cogiendo las piernas con las manos de camino al autobús. Evidentemente, ya no tenía tiempo de ponerse una camiseta.
La razón tiene un nombre: Hansi Flick.
Porque este hombre de 59 años ha traído una virtud alemana a Cataluña. Quien llegue un minuto tarde, se queda en el banquillo. Y a Flick le da igual si la persona es Pablo Torre o Robert Lewandowski y si el rival se llama Real Valladolid o Real Madrid.
Para Flick, lo que importa es el «respeto»
Jules Koundé puede dar fe de ello. El técnico alemán ha alineado al francés en todas las ocasiones, y solo en tres partidos de liga esta temporada ha salido desde el banquillo. Según Flick, Koundé no ha mirado el reloj en ninguna de esas ocasiones.
Así sucedió también el lunes contra el Rayo Vallecano, como confirma Flick. «Hay dos o tres reuniones con los jugadores, y es muy importante que estén presentes», dijo el entrenador sobre su línea dura después de la victoria por 1-0 contra el Rayo. No es tan difícil presentarse y someterse. Es una cuestión de respeto. Flick quiere volver a hablar con Koundé. «Llegó tarde, pero esa es una regla que debe quedar clara».
En cualquier caso, no es algo nuevo. «Cada entrenador tiene sus castigos. Con Xavi eran multas que se duplicaban cada minuto», informó Pedri hace varios meses. Con Flick no es así. «Si llegas tarde, no juegas».
Pau Víctor también ha hablado sobre el tema. «Cuando estableció las reglas, yo todavía no estaba allí, pero me advirtieron que tuviera cuidado. Si dice: «A las 11 en el campo» y llegas tres segundos tarde, para él llegas tarde».
Por no hablar de los tres minutos que Iñaki Peña llegó tarde a sudar antes de la semifinal de la Supercopa contra el Athletic de Bilbao a principios de enero. Wojciech Szczesny recibió la preferencia por ello e hizo un buen trabajo en la victoria por 2-0. Mientras tanto, el polaco ha tomado la delantera en la lucha por el número uno.
