Copenhague – La ex número uno del mundo, Caroline Wozniacki, no piensa actualmente en volver a los grandes escenarios del tenis.
«De momento no pienso en volver. Estoy muy ocupada y feliz con mi vida tal y como es», dijo la joven de 31 años, según la agencia de noticias Ritzau.
La danesa jugará allí el martes por la noche su partido de despedida contra la mejor jugadora alemana Angelique Kerber, que ya disputó su último encuentro oficial en el WTA Tour en el Abierto de Australia de 2020.
Wozniacki fue madre por primera vez el pasado mes de junio. La hija Olivia, sin embargo, no es la única razón en contra de un posible regreso: en el año de su primer y único triunfo en el Grand Slam, en el Abierto de Australia 2018, se le había diagnosticado artritis reumatoide, una enfermedad autoinmune que causa inflamación e hinchazón de las articulaciones, entre otras cosas.
El fin de su carrera le hace más fácil vivir con la enfermedad. «Probablemente nunca me libraré por completo de ella, pero he conseguido cuidar un poco más mi cuerpo», dijo Wozniacki.
