El Athletic de Bilbao ya había ganado 1-0 en la ida de semifinales al Atlético de Madrid. Iñaki y Nico Williams sentenciaron el partido en el descanso ante un conjunto madrileño muy trabajado. Tras el 3-0 de la vuelta, los vascos se enfrentarán en la final al RCD Mallorca
Hace unas tres semanas, el Athletic de Bilbao se impuso por 1-0 en Madrid en la ida de las semifinales de la Copa del Rey. Por consiguiente, los vascos afrontaron el partido de vuelta en casa con una ligera ventaja en la búsqueda del segundo finalista. Dos días antes, el RCD Mallorca ya había alcanzado la final en la tanda de penaltis contra la Real Sociedad.
Los hermanos Williams dan ventaja al Bilbao al descanso
Después de que el Atlético comenzase presionado, los locales se adelantaron de forma un tanto sorprendente: Nico Williams se internó por la línea de fondo izquierda y centró al centro, donde su hermano Iñaki Williams remató de volea (13′). Unos 14 minutos más tarde, fue otra coproducción entre los dos hermanos la que causó peligro. Esta vez, Iñaki asistió a su hermano menor Nico, que no llegó por poco (27′).
En el otro extremo, Correa falló el gol del empate desde una posición prometedora después de que Morata jugara con él por detrás (31′). Los madridistas se vieron sorprendidos poco antes del descanso, cuando los veloces hermanos Williams volvieron a meterse en el partido: Iñaki se internó por la derecha y asistió a Nico, que remató desde dentro del área de cinco metros para marcar el 2-0 con el que se llegó al descanso.
Guruzeta pone la tapa
Unos minutos después del descanso, que se retrasó alrededor de un cuarto de hora debido a una emergencia médica en las gradas, los vascos dispusieron de una buena oportunidad para marcar un tercer gol. Nico Williams jugó un contragolpe para Sancet, que disparó muy por encima de la portería de Oblak desde una buena posición (51′).
Diez minutos más tarde, llegó el momento: Oblak dejó que un disparo de Sancet rebotara en el delantero Guruzeta, que estaba en la posición perfecta para marcar el 3-0 (61′). A continuación, el Atlético tuvo ocasiones para empatar a través de Lino con un disparo lejano (71′), Morata con un cabezazo (72′) y un lanzamiento de falta de Depay (75′), pero no fue lo suficientemente contundente.
Los vascos se impusieron merecidamente por 3-0 y se clasificaron para la final de la Copa del Rey contra el RCD Mallorca. Es la tercera participación del Athletic de Bilbao en una final en los últimos cinco años: En 2020 fue derrotado por la Real Sociedad y un año después por el FC Barcelona. Los bilbaínos llegan a la final como favoritos ante los mallorquines.