Los días de prueba en el Campeonato Mundial de Superbikes son estrictamente limitados: Scott Redding y sus compañeros del WSBK utilizan por tanto las motos de producción como oportunidad de entrenamiento
Los pilotos del WSBK sólo disponen de diez días de test libres al año para preparar la temporada o las carreras durante el transcurso de la misma. Especialmente en invierno, los pilotos pasan a realizar pruebas con motos de serie para mantenerse en forma. Scott Redding es uno de los pilotos a los que les gusta recurrir a esta opción. El británico está pilotando actualmente una BMW M1000RR en España.
¿Por qué son tan importantes los días de pista con la superbike de producción para Redding? «El aspecto más importante es divertirse. Al divertirte pilotando, sientes que, a diferencia de un fin de semana de carreras, no se trata únicamente de obtener el mejor resultado posible y estar presionado por ello.
«Soy un piloto bastante agresivo. Pero con la moto de serie no se puede llegar a ese límite. Hay que montar de forma diferente. Eso me ayuda cuando vuelvo a correr en bicicleta», explica el medallista de bronce del Campeonato del Mundo de 2021.
¿Por qué no puede Redding presionar tanto con la moto de producción? «Los componentes son diferentes, como el chasis y los frenos. Pero también la rigidez es diferente porque la moto de serie no tiene tanta potencia. Por eso no es tan rígido. Sólo tienes que pilotar de forma diferente», razona el ex piloto de MotoGP.
La pandemia de coronavirus y el Brexit complican la formación
Siguiendo los canales de redes sociales de Redding, se nota que el británico ha entrenado más a menudo en una moto de carretera que en una superbike en los últimos años. ¿Por qué? «Por culpa de Covid y también del Brexit, me resultó difícil entrenar en la pista», describe.
«Me gusta hacer trackdays, es divertido para mí. El calendario de la temporada no deja mucho tiempo para días de entrenamiento extra. Es mejor recuperarse y prepararse para la carrera que se avecina», dijo Redding.
Scott Redding ayuda a los corredores aficionados como instructor
El año pasado también se vio a Redding como instructor. ¿Es algo que le gusta o lo ve como un modelo de negocio? «Disfruto ayudando a los jinetes aficionados. Me da placer. Me gusta ver cómo mejoran otras personas. No se trata principalmente de ganar dinero», informa el ex piloto de Ducati.
«Muchos de mis clientes me han dicho que han aprendido más en un día conmigo que en tres o cuatro años. Eso me hace feliz. Demuestra que fui capaz de conectar con ellos y transmitirles información», dice Redding, citando su motivación.
Al mismo tiempo, está convencido de que no todos los profesionales tienen lo necesario para enseñar a los corredores aficionados. «Hay muchos buenos pilotos. Pero muchos de ellos no saben lo que están haciendo realmente. Sólo tienen talento. Lo desgloso todo en mi cabeza y hago mis reflexiones», dijo Redding.