El Fenerbahçe puede seguir soñando con la Liga de Campeones. Sin embargo, su actuación en la derrota por 2-1 ante el FC Lugano dio a los aficionados menos motivos para soñar
No fue un debut en casa a lo grande, ni en sentido positivo ni negativo. El Fenerbahçe pasó a la tercera ronda de la fase previa de la Liga de Campeones con una victoria poco inspirada por 2-1 contra el FC Lugano. La semana que viene, el partido contra el Lille de la Ligue 1 será aún más emocionante. El partido de ida se disputará en Francia el 6 de agosto y el de vuelta en Turquía el 13 de agosto.
El Fener afrontó el partido de vuelta contra el Lugano sin su nuevo goleador, En-Nesyri, el fichaje más caro de la historia de la SüperLig. Hace siete días, el subcampeón turco había ganado un espectacular partido en Suiza por 4:3. Un triplete de Dzeko, ex jugador del Wolfsburgo, había salvado al Fenerbace en aquella ocasión. El goleador, que ahora tiene 38 años, también iba a tener una influencia decisiva esta vez.
Antes, sin embargo, el Lugano se coló en la fiesta en el debut en casa del entrenador José Mourinho. Tras una cadena de errores de la defensa turca, al final de la cual Szymanski cabeceó el balón al borde del área, Hadj Mahmoud arriesgó al máximo y marcó con un remate de ensueño por la escuadra derecha (minuto 7).
Sólo un 42% de posesión y tres tiros a puerta
En una primera parte en la que el Fenerbahçe sólo tuvo un 42% de posesión y tres tiros a puerta, la lesión de Fred, al que Yüksek tuvo que sustituir a los 31 minutos, agravó los problemas. Krunic, sobrecargado en la primera parte, fue sustituido por Yandas en el descanso.
Una buena decisión de Mourinho, ya que Yandas lanzó una falta desde la derecha al área en el minuto 59, donde Dzeko quedó libre de marca y cabeceó al fondo de las mallas para poner el 1-1 en el marcador. A partir de entonces, el partido se llenó de tensión antes de decantarse a favor de los locales en el tiempo añadido: Dzeko inició, Kahveci centró, Tadic remató de cabeza y Szymanski -desafortunado antes del 0:1- empujó el balón sobre la línea para hacer el definitivo 2:1 (90.+3).
