Giannis Antetokounmpo estuvo con los Milwaukee Bucks en Nueva York y celebró una incontestable victoria por 130:111 ante los Knicks en el Madison Square Garden.
Antetokounmpo también tuvo mucho que ver en el éxito con 28 puntos, siete asistencias y otros tantos rebotes -por cierto, fue la séptima victoria consecutiva de los Bucks-. El griego contó con el apoyo del escolta Khris Middleton, que anotó 20 puntos. Los Bucks convencieron en todos los aspectos, jugaron a un ritmo alto y brillaron con un gran porcentaje de tiro (52,7% en tiros de campo y 50% desde el exterior).
Los visitantes se hicieron rápidamente con una cómoda ventaja y se aseguraron de que las cosas estuvieran claras desde el principio con un parcial de 11:0 en el último cuarto, que llegó a ser de 114:92 en un momento dado. El pívot Damian Lillard sumó 19 puntos, nueve rebotes y siete asistencias, mientras que el escolta Malik Beasley (19 puntos) anotó cinco triples.
A los Knicks, que sólo encestaron 9 de 29 triples desde el exterior y además tuvieron un porcentaje en tiros de campo inferior al de los visitantes (41/93, 44,1%), no les ayudó un brillante Jalen Brunson (36 puntos). Perdieron ante Milwaukee por novena vez consecutiva y tendrán que pensar en algo cuanto antes si quieren evitar otro choque desigual el lunes (18:00 CET), cuando se enfrenten a los Bucks en el Partido de Navidad.
Junto a Brunson, el ala-pívot Julius Randle (26 puntos) también cuajó una buena actuación, mientras que el pívot alemán Isiah Hartenstein sumó 12 puntos y 13 rebotes, y eso en 33 minutos de juego, en los que sólo Randle (34) y el base Brunson (37) estuvieron más tiempo en pista.
La victoria puso a los campeones de 2021 por delante en la carrera por el primer puesto de la Conferencia Este y metió presión a los Boston Celtics.
