Luka Doncic ha regresado de forma impresionante en su primer enfrentamiento con los Dallas Mavericks tras el intercambio de estrellas. La superestrella eslovena llevó a sus Los Angeles Lakers a una reñida victoria por 107 a 99 en casa contra su antiguo equipo. Consiguió un triple-doble.
Ya de antemano estaba claro que este partido sería mucho más que un partido normal para Doncic. Hacía solo unas semanas que el traspaso que lo envió a Los Ángeles y a Anthony Davis a Dallas había sido noticia. Ahora se enfrentaba a su ex equipo y cumplió.
Desde el principio del partido, Doncic buscó el duelo directo con sus antiguos compañeros. Lo más llamativo: después de las jugadas exitosas, su mirada se dirigía una y otra vez al banquillo de los Mavericks. Era evidente que quería dejar claro algo.
Una jugada espectacular que sorprende
Además de sus excelentes estadísticas, Doncic protagonizó el momento más destacado de la noche en el segundo cuarto. Con un pase sin mirar por encima de la cabeza, asistió a Austin Reaves, que completó el ataque con un triple. El Crypto.com Arena se puso patas arriba mientras los gritos de MVP resonaban por todo el pabellón.
LeBron James apoyó a Doncic, que anotó 19 puntos, capturó 15 rebotes y repartió 12 asistencias, con una gran actuación y sumó 27 puntos y 12 rebotes. Reaves también jugó un papel decisivo y metió algunos tiros importantes para los Lakers.
Kyrie Irving mantiene a Dallas en el partido
Los Mavericks empezaron el partido con más debilidad y perdían por 20:28 al final del primer cuarto. Sin embargo, Dallas, liderado por Kyrie Irving (35 puntos), se recuperó en el partido. Especialmente en el tercer cuarto, los visitantes lograron romper la defensa de los Lakers en varias ocasiones y reducir la diferencia a un punto.
En el último cuarto se produjo un intercambio de golpes abierto, pero en la fase decisiva los Lakers tuvieron mejores respuestas. Doncic y LeBron tomaron el mando en el momento decisivo y se aseguraron de que Dallas no se acercara.
