La incitación al odio, los insultos y los malos tratos en las redes sociales también son un problema en el fútbol: ahora la FIFA y el sindicato profesional FIFPRO quieren tomar medidas contra ellos.
Según anunció la FIFA el sábado, se establecerá un servicio especial de moderación en los torneos masculinos y femeninos. Esto ayudará a reducir la visibilidad y el alcance de los comentarios ofensivos o difamatorios en las redes sociales. De cara a los Mundiales masculinos de Catar en 2022 y femeninos en 2023, la FIFA dice que quiere «enviar una señal fuerte y en el futuro vigilar también en las redes sociales lo que ya se vigila en los estadios». Queremos que nuestros actos hablen más que nuestras palabras».
«Uno de nuestros deberes es proteger el fútbol, y esto empieza por los jugadores que nos dan tantas alegrías con sus actuaciones sobre el terreno de juego», afirma el Presidente de la FIFA, Gianni Infantino, en un comunicado de la asociación. «Desgraciadamente, hay una tendencia a que un cierto porcentaje de publicaciones en las redes sociales se dirijan contra los jugadores, entrenadores y directivos y los propios equipos, y esta forma de discriminación, como cualquier otra, no tiene cabida en el fútbol».
Informe inquietante
FIFA también presenta un informe que deja en evidencia el alcance de los insultos, la incitación y la discriminación. Mediante el uso de inteligencia artificial, un amplio estudioexaminó más de 400.000 publicaciones en las redes sociales.
Se descubrió que más de la mitad de los jugadores habían recibido algún tipo de insulto discriminatorio. Los comentarios homófobos (40%) y racistas (38%) constituyeron el grueso de los abusos, muchos de los cuales procedían del país de origen de la víctima en cada caso; muchos de estos comentarios siguen siendo visibles, según el estudio.
«Las investigaciones como estos informes son cruciales, pero deben conducir a la adopción de medidas que prevengan y remedien», añadió el presidente de FIFPRO, David Aganzo: «El abuso en línea es un problema de la sociedad y nosotros, como industria, no podemos aceptar que esta forma de abuso y discriminación afecte a tantas personas, incluidos los activistas. Nos alegra que esta colaboración con la FIFA sea un paso constructivo en esa dirección».
Además de abordar los propios comentarios, los jugadores y los asistentes a los torneos también recibirán apoyo educativo -incluidas las mejores prácticas para gestionar las cuentas de las redes sociales- y asesoramiento en materia de salud mental.
