Su descanso de un año de la Fórmula 1 fue importante, dice el piloto de Haas Kevin Magnussen, porque cambió su visión del deporte y su apreciación del mismo
La carrera de Kevin Magnussen en la Fórmula 1 tuvo un comienzo prometedor. En su primera carrera, en el Gran Premio de Australia de 2014, el danés terminó segundo en el podio con un McLaren-Mercedes. Sin embargo, hasta la fecha no ha podido repetir este éxito. Sigue siendo su único podio
McLaren le sustituyó por Fernando Alonso tras sólo una temporada. Magnussen permaneció inicialmente como piloto de pruebas, luego pasó a Renault y finalmente a Haas. Con un material inferior, sin embargo, no había mucho que ganar para el ahora piloto de 31 años.
Sólo entró en los puntos de forma esporádica y perdió su cockpit en favor de un novato a finales de 2020. Entonces llegó el inesperado regreso en 2022: Haas se separó de Nikita Masepin debido a la invasión rusa de Ucrania y trajo de vuelta a Magnussen.
Echando la vista atrás, el danés admite: «Creo que puede que haya perdido un poco el amor por la Fórmula 1 en los años previos a mi regreso. Es así: Pasas por las categorías inferiores, eso es una cosa, y luego, cuando llegas a la Fórmula 1, es algo completamente diferente.»
«Por supuesto, hay gente que llega a la Fórmula 1 después de su carrera junior y triunfa inmediatamente allí. Pero yo tuve muchos años… bueno, hubo seis temporadas más o menos antes de este parón en las que no gané nada».
«Así que creo que me desencanté un poco de la Fórmula 1. Y entonces me tomé un año sabático, lo eché de menos y volví. Y tuve un nuevo tipo de aprecio por ella». Una cierta distancia y una nueva perspectiva del deporte también ayudaron al piloto de Haas
«Después de dejar el deporte, no del todo, seguía corriendo, pero en coches deportivos, así que estuve completamente fuera de la Fórmula 1 durante un tiempo y pude mirarla desde fuera, pensar en ella desde fuera», explica Magnussen. «Y luego volví a ella».
