La Fórmula 2 no cree posible llevar la serie junior a la era híbrida: estas son las razones por las que es improbable que la tecnología se materialice
Las grandes series han apostado por el híbrido, es decir, la mezcla de motor de combustión y motor eléctrico. La Fórmula 1 lleva tiempo apostando por ella, y el Campeonato del Mundo de Resistencia, la IMSA y la IndyCar han seguido su ejemplo. El Campeonato del Mundo de Rallyes (WRC) acaba de poner fin al experimento y volverá a apostar exclusivamente por los motores de combustión a partir de 2025. Pero, ¿tiene sentido llevar el híbrido también a las categorías de fórmula junior? El jefe de la Fórmula 2, Bruno Michel, cree que es «imposible»
Por tanto, la Fórmula 2 seguirá apostando en el futuro por los motores de combustión puros; según el director general Michel, el híbrido no es una opción. El más alto nivel en el camino hacia la Fórmula 1 ya ha considerado equipar su coche con un motor eléctrico, pero hay una sencilla razón por la que esta idea nunca se llevó a cabo: el coste.
«Sencillamente, no podemos permitirnos un híbrido como en la Fórmula 1», explica Michel. «Es tan sencillo como eso. No es posible porque los costes de una temporada se triplicarían». Los pilotos del paddock afirman repetidamente que una temporada en Fórmula 2 ya cuesta bastante más de un millón de euros, y se habla de costes de funcionamiento de tres millones de euros por coche. Con el híbrido, esto podría elevarse rápidamente a nueve millones de euros.
«Nos fijamos en lo que está haciendo la IndyCar y también hablamos con los responsables para ver qué podíamos asumir. Para ser sincero, el beneficio es casi nulo debido a los costes», dice Michel. «Por eso decidimos centrarnos en el combustible sostenible, porque como serie ya tenemos ventaja en comparación con otros campeonatos. «
La Fórmula 2 ya funciona con un 55% de combustible renovable, y la proporción aumentará al 100% en 2025. La Fórmula 1 no seguirá el ejemplo hasta 2026. «El año que viene utilizaremos el 100% de combustible sostenible, biocombustible», afirma Michel. «Pronto seremos los primeros en utilizar gasolina sintética. Ese es nuestro planteamiento. Pasarnos al híbrido nos supondría un gran cambio tecnológico que no podemos permitirnos».
Sin embargo, el biocombustible también plantea retos, ya que hay que adaptar partes del motor. Por ejemplo, hay que perfeccionar el sistema de inyección para utilizar el nuevo combustible de forma eficiente. Según Michel, la Fórmula 2 trabaja constantemente en el desarrollo del motor. «El año que viene, el motor será un poco diferente del actual. Se adaptará a las necesidades del combustible Aramco, que será 100% sostenible».