Costa de Marfil ha ganado la Copa de África por tercera vez – y por primera vez desde 2015. El profesional del BVB Sebastien Haller fue el ganador del partido con su gol de oro con la punta del pie poco antes del final. Nigeria careció de respuesta en ataque
La turbulenta Copa de África de Costa de Marfil, con cambio de seleccionador tras dos derrotas en la ronda preliminar y varias remontadas en la fase eliminatoria, llegó a su punto culminante a última hora de la tarde del domingo. Y en la final contra Nigeria, los anfitriones también tuvieron que remontar una desventaja para celebrar su tercer triunfo en la Copa Africana.
Dos profesionales de la Bundesliga formaron parte del once inicial de Costa de Marfil. Haller, del BVB, regresó a la delantera, mientras que Kossounou, del Leverkusen, volvió a la defensa tras la derrota por 1-0 ante la RD del Congo en semifinales. El seleccionador interino Emerse Faé Aurier salió de inicio por Boly (que no estaba en la convocatoria) como segundo cambio antes de la final. Nigeria también introdujo dos cambios tras su victoria por 4-2 en la tanda de penales contra Sudáfrica: El atacante del Milan Samu Chukwueze sustituyó a Simon, y Zaidu, del Oporto, jugó en la banda por Osayi-Samuel (ambos en el banquillo).
Como era de esperar, Nigeria, que sólo había encajado dos goles en todo el torneo hasta la fecha, se concentró en defender, manteniéndose profunda en su mayor parte y resistiendo los tímidos intentos ofensivos iniciales de los marfilenses con una exhibición de solidez y dureza física.
En el minuto 7, Haller y Gradel fallaron un centro a media altura y los eufóricos seguidores del país anfitrión tuvieron que esperar un buen cuarto de hora para la siguiente ocasión. Gradel remató al exterior de la red con un tiro por alto desde el área de cinco metros tras un saque de esquina (21′), mientras que el guardameta nigeriano Nwabili detuvo el disparo de Adingra libre de marca (34′).
Troost-Ekong sorprende a Costa de Marfil poco antes del descanso
Sin embargo, Costa de Marfil tuvo problemas para romper la defensa rival. En lugar de eso, las Súper Águilas sorprendieron a los marfilenses al adelantarse de la nada en el minuto 38: Troost-Ekong se elevó en un abrir y cerrar de ojos a la salida de un córner y cabeceó a la escuadra: sólo el segundo disparo a puerta de Nigeria en la primera parte.
Tras el descanso, el juego fue muy similar al de la primera parte. Costa de Marfil tuvo bastante más posesión y presionó en busca del empate. El nigeriano Bassey detuvo un disparo de Gradel justo antes de la línea (50′), Seri desde lejos (59′) y Kessié con un cabezazo picado (60′) seguían siendo demasiado imprecisos. Sin embargo, los marfilenses se vieron recompensados a continuación por su fase de presión
Haller da la vuelta al partido – Abiyán explota
Tras un saque de esquina, Kessié marcó de cabeza el gol del empate (62′) y el Stade Olympique Alassane Ouattara explotó literalmente. Y los Elefantes no cejaron en su empeño. Haller colocó su espectacular disparo lateral junto a la portería (75′), pero poco después tuvo la suerte de cara. Adringa realizó una rápida jugada por la banda izquierda y su pase a media altura encontró a Haller, que metió el balón en la red con la puntera (81′).
Nigeria disponía de poco más de diez minutos para darle la vuelta al partido. Sin embargo, las Súper Águilas no lograron atacar lo suficiente, y los marfilenses rechazaron con facilidad los balones altos hacia el área rival. Tras siete minutos de tiempo añadido, el Stade Olympique Alassane Ouattara se convirtió finalmente en un manicomio. Con el pitido final, los marfilenses, desbordados por la emoción, cayeron abrazados, e incluso Haller, el autor del gol de la victoria, no pudo reprimir las lágrimas.
