Durante semanas, el debate sobre la entrada de Novak Djokovic en Australia mantuvo en vilo a los aficionados al tenis. Entonces estaba claro: debía abandonar el país. Ahora se ha dado la razón oficial por la que no se permitió jugar a Djokovic.
Cuatro días después de que se rechazara el recurso de Novak Djokovic contra la cancelación de su visado, el Tribunal Federal ha anunciado su razonamiento. Según ella, era razonable que el gobierno australiano supusiera que el tenista profesional serbio tenía una actitud antivacunas y era una amenaza para el público. Esto es según los documentos publicados por el tribunal el jueves.
«Una estrella del tenis mundial puede influir en personas de todas las edades, jóvenes y mayores, pero quizás especialmente en los jóvenes e impresionables», decía el razonamiento de los tres jueces. Aunque Djokovic no hubiera ganado el Open de Australia, el hecho de que jugara al tenis en ese país podría haber animado a los que querían ser como él y, en consecuencia, podría haber alimentado el sentimiento antivacunas.
Ver justificado
La parte de Djokovic había argumentado previamente que era inapropiado presentar a la estrella del tenis serbio como antivacunas y que el ministro de Inmigración Alex Hawke no podía conocer su actitud. Sin embargo, el tribunal consideró probado que la opinión del gobierno estaba justificada, en parte porque Djokovic había decidido no vacunarse.
Los daños en el Open de Australia: El tenis alemán está en crisis
Derrumbe en el Open de Australia: Dura derrota para el tenista profesional alemán
Investigación contra Corona: Djokovic compra una empresa de biotecnología
Tras una batalla judicial de varios días, el Tribunal Federal de Melbourne declaró legal la retirada del visado el pasado domingo. El número uno del mundo tuvo que abandonar Australia como consecuencia de ello y no puede defender su título en el actual Abierto de Australia. Djokovic había viajado a Australia sin vacunarse porque quería participar en el torneo de Grand Slam con una exención médica. Sin embargo, al entrar, su visado fue cancelado porque el serbio, de 34 años, no pudo aportar pruebas suficientes para obtener el permiso especial.