El Borussia Mönchengladbach cayó derrotado por 2-0 en Leipzig y sigue cerca de la zona de descenso. Lo que más llamó la atención fue la portería a cero. Una vez más, el juego ofensivo de los Foals no rebosó espíritu
La situación en el Gladbach sigue siendo tensa, incluso una semana antes del importante partido en casa contra sus vecinos del VfL Bochum. Aunque sufrió una derrota totalmente esperada en Leipzig (2-0) ante el claro favorito, que deja al equipo del Bajo Rin con un escaso bagaje de cinco victorias esta temporada y sólo 22 puntos, fue su juego ofensivo el que volvió a causar mayor preocupación.
En los últimos cuatro partidos de liga, los potros han dejado de marcar en tres ocasiones y sólo han anotado dos goles en los últimos cinco encuentros de la Bundesliga. Demasiado poco para sus propios estándares.
Y en Sajonia pudieron haber marcado el 1-2: El comodín Nathan Ngoumou tuvo el gol en su pie derecho en el minuto 68, pero disparó fuera del área del guardameta del RB Peter Gulacsi. Más tarde, el delantero Jordan se elevó alto, pero su cabezazo se fue a la izquierda de la portería del Leipzig
«Tenemos que cambiar eso «
En resumen: al juego ofensivo del Gladbach le faltó la precisión necesaria, aunque también hubo margen de mejora en otros aspectos.
El defensa Nico Elvedi, que al igual que su compañero de zaga Ko Itakura será baja ante el Bochum por haber recibido la quinta tarjeta amarilla en ambos casos y obligar al técnico suizo Gerardo Seoane a realizar cambios, reconoció en una entrevista concedida a Sky: «En ataque fuimos demasiado inofensivos, sobre todo en la primera parte, y nos faltó consistencia con el último pase. Luego estuvimos dormidos en la salida y cogimos el 0-1 aquí».
En su opinión, estos fueron los factores decisivos para la merecida victoria del Leipzig. O dicho de otro modo: «Demasiada poca determinación de cara a portería, demasiado poco entusiasmo de cara a portería; tenemos que cambiar eso».
El entrenador Seoane también reconoció y abordó estos puntos y deseó una pronta mejoría. Su comentario sobre los problemas ofensivos de sus pupilos: «Hubo remates de cabeza, hubo situaciones. Pero no disparamos con suficiente precisión, no cabeceamos con suficiente precisión, no fuimos limpios en el remate y no tuvimos suficiente determinación». Queda por ver contra el Bochum si la creatividad y el espíritu volverán a encontrar su sitio en el juego del Borussia Gladbach, que ya suma más goles en su cuenta particular (36) que otros once (¡!) clubes de la Bundesliga, entre ellos el Eintracht de Fráncfort y el prometedor Werder Bremen.