El Manchester City está haciendo aguas. En el duelo de perseguidores en casa del Aston Villa, los campeones mostraron varios puntos débiles, como vienen haciendo últimamente, se mostraron demasiado inofensivos sobre todo en ataque e incluso tuvieron que dejar que el Villa les adelantara en la tabla tras la derrota por 1-0. El ManCity sólo es cuarto
Aston Villa y Manchester City se enfrentaron el miércoles por 160ª vez. Para los Sky Blues en particular, que sólo habían ganado uno de sus últimos cuatro partidos, el duelo de perseguidores era un partido importante. El entrenador Pep Guardiola introdujo dos cambios tras la montaña rusa emocional del empate a 3-3 contra el Tottenham Hotspur, dando entrada a Stones y Lewis por Rodri (sancionado con tarjeta amarilla) y Doku (no convocado).
Los Villanos también habían empatado recientemente, pero el 2-2 en Bournemouth fue también su quinto partido oficial consecutivo sin conocer la derrota (4-1-0). Como era de esperar, el técnico Unai Emery no vio motivos para hacer cambios, y sólo Kamara fue titular en lugar de Zaniolo (en el banquillo).
El plan de Emery funciona
El Villa sólo había perdido uno de sus últimos doce partidos oficiales, por lo que recibió al campeón con el pecho ancho, y rápidamente demostró que estaba a la altura del City. El club de Birmingham brilló desde el saque inicial con un ritmo alto, un colectivo atento y un fuerte pressing.
El equipo de Emery se impuso una y otra vez en el centro del campo a los visitantes, que no estuvieron del todo impecables, y crearon más ocasiones pese a tener una menor participación en el juego: Digne (4), Bailey (6, 22), Konsa (29), Tielemans (33) y Douglas Luiz (41) desaprovecharon algunas oportunidades de primer nivel.
¿Y el Manchester? Haaland tuvo dos megaoportunidades con pocos segundos de diferencia en el minuto 11, pero primero falló con el pie y poco después con la cabeza ante Martínez, el portero del Villa, que reaccionó con contundencia. Por lo demás, no hubo mucho que ver de los Sky Blues en ataque, en parte porque fueron incapaces de hacer frente al agresivo pressing de su rival en el centro y, en consecuencia, no pudieron construir juego con su habitual confianza. Al final, los visitantes, muy decepcionantes por momentos, pudieron incluso alegrarse de que el marcador fuera de 0-0 al descanso
Sigue la intensidad, pero menos ocasiones
No es ningún secreto que no se puede mantener el ritmo que mostró el Villa en la primera parte durante 90 minutos, y eso fue evidente tras el descanso. El City controló mejor el partido en la segunda parte, mientras que el Villa se volvió más propenso a cometer errores. Como resultado, a pesar de la alta intensidad continuada, faltó ímpetu ofensivo y, por tanto, también buenas llegadas.
Eso cambió en el minuto 74, cuando Gvardiol no pudo agarrar a Bailey, que se internaba por medio campo, se cargó y el jamaicano tuvo suerte de que Rubén Dias desviara a su propia portería su inofensivo derechazo. Fue un golpe para los Sky Blues, del que nunca se recuperaron. El Villa incluso pudo haber hecho algo más, pero Ederson realizó una gran parada ante Douglas Luiz (78′) para mantener el partido abierto hasta el final, pero nada más.
Después de diez años y 13 intentos infructuosos (0-2-11), el Aston Villa logró por fin su primera victoria contra el City desde el 28 de septiembre de 2013 (3-2), lo que permitió a los de Emery adelantar a los Citizens y colocarse terceros. Así pues, los Villanos pueden afrontar su próximo choque contra el líder de la liga, el Arsenal FC, en Villa Park el sábado (18:30 horas) con mucha confianza. El Manchester City se enfrentará al Luton Town al día siguiente (15:00 horas).