La decisión está tomada. El FC Barcelona terminará la temporada en el estadio alternativo de Montjuic. En realidad, el regreso al Camp Nou debería haberse completado hace mucho tiempo.
El Barcelona ha informado a todos sus socios y abonados que el club terminará la temporada en el Estadio Olímpico. Hasta ahora había esperanza de poder disputar al menos un partido de liga en el recién remodelado Camp Nou. Sin embargo, los catalanes han comunicado que el abono para el Estadi Olimpic Lluis Companys puede prorrogarse hasta el final de la temporada 24/25.
El regreso al Camp Nou se ha pospuesto varias veces. Inicialmente, el traslado estaba previsto incluso para noviembre de 2024 con motivo del 125 aniversario del club, aunque por el momento solo con una ocupación del 60 %. Posteriormente, la fecha se pospuso hasta finales de enero, cuando finalizó la fase de grupos de la Liga de Campeones. Luego se barajó abril y después mayo, pero eso ya tampoco es realista.
Las razones que aducen los catalanes para el aplazamiento son diversas. Entre ellas se encuentran la escasez de materiales para trabajos importantes o la falta de mano de obra cualificada. También se alega que una serie de permisos no se han recibido a tiempo. A esto se suman los retrasos causados por las condiciones meteorológicas.
Los pronósticos erróneos de Laporta
El retraso también es un revés para el presidente Joan Laporta, que ha anunciado en repetidas ocasiones que se despedirá pronto del Estadio Olímpico. «Todo parece indicar que podremos volver a jugar en el Camp Nou a finales de año», se dijo, por ejemplo, en septiembre de 2024. La reducción del aforo —el Estadio Olímpico tiene capacidad para 54.367 espectadores y la mayoría de los partidos no se llenan— también afectará económicamente al club, que ya de por sí está en una situación precaria.
El Camp Nou se inauguró en 1957 y se reformó por última vez en 1989. Tras la actual reforma y la construcción parcial de nuevas instalaciones, la capacidad aumentará hasta los 105.000 espectadores. El nuevo Camp Nou estará terminado definitivamente en verano de 2026 e incluirá una cubierta retráctil para todas las tribunas.
