La forma en que el Chelsea FC se ocupa de los jugadores que ya no le sirven es sólo en parte coherente con las declaraciones de su entrenador, Enzo Maresca. El último ejemplo: los números de camiseta.
Cuando Joao Félix concedió su primera entrevista tras su regreso al Chelsea FC el miércoles, también habló de querer hacer del club su nuevo «hogar»: «Después de dos cesiones -Chelsea y Barça- simplemente tenía que quedarme en un lugar de forma permanente. Y no hay mejor lugar para mí que el Chelsea, es el lugar perfecto para brillar».
Sin embargo, queda por ver si realmente es el lugar perfecto al que llamar hogar. Después de todo, sólo unos pocos jugadores lo han conseguido desde el cambio de propiedad en 2022. Los Blues vuelven a intentar deshacerse de numerosos jugadores en el último momento y adoptan un enfoque duro: Un grupo más numeroso -el entrenador Enzo Maresca habló de «15 a 20» profesionales el miércoles- sólo pueden entrenar aparte y tampoco son ya convocados para los partidos.
Sterling y Chalobah ya no tienen dorsal
Para dejar aún más claro a quién le conviene dejar el club si quiere jugar al fútbol en 2024/25, los Blues también han reasignado sin contemplaciones dos números de camiseta: Raheem Sterling, el miembro más destacado de la plantilla, tuvo que ceder su número 7 al nuevo fichaje de 60 millones de euros Pedro Neto, que aún así lució el 19 en el estreno de la Premier League contra el Manchester City (0:2). Y Trevoh Chalobah, un candidato a la venta especialmente atractivo por ser canterano y un pilar importante de la defensa en los últimos compases de la pretemporada, ha perdido su 14, que recibirá Joao Félix.
Sterling y Chalobah siguen apareciendo en la lista de convocados de la web oficial del Chelsea, que recientemente se redujo de más de 40 a 33, pero ya no tienen número de camiseta. El contrato de Sterling se extiende hasta 2027, el de Chalobah hasta 2028, mientras que jugadores como Romelu Lukaku y Kepa ya no están en la lista, a pesar de que todavía no han firmado por ningún otro club.
«Desde mi punto de vista, no es brutal, es honesto», dijo Maresca el miércoles sobre su trato con Sterling, Ben Chilwell y compañía.
