El Borussia Dortmund también debe tener cuidado con Nicolas Kühn (24) en su choque contra el Celtic de Glasgow. El atacante alemán quiere jugar con la selección nacional, aunque aquí en Alemania apenas se le conoce
Su nombre aparece entre Kai Havertz, Karim Adeyemi y Florian Wirtz: Nicolas Kühn. En la lista de ganadores de la Medalla de Oro Fritz Walter, el atacante céltico de 24 años se une a varios internacionales actuales. Y si se sale con la suya, el campeón sub-19 de 2019 no se quedará sólo en esta lista. Quiere estar en la lista de convocados de la DFB.
Kühn no es un nombre conocido en Alemania. Sus únicas apariciones profesionales en este país han sido con el segundo equipo del FC Bayern en la 3ª división y con el Erzgebirge Aue en la 2ª Bundesliga, y de eso hace ya más de dos años. Una lucha por el descenso en el Erzgebirge en lugar de la máxima categoría en Dortmund. «Ya entonces formulé claramente mis objetivos», dice, «a saber, que quería jugar en la Liga de Campeones y luego también con la selección nacional». «
Kühn ha logrado ahora su primer objetivo. Hace quince días celebró su debut en la Premier League con el Celtic en la victoria por 5:1 contra el Slovan de Bratislava, en la que contribuyó con una asistencia. Kühn suma ya un total de 13 tantos en nueve partidos oficiales esta temporada. Sin embargo, no fue un partido de competición en el que causó el mayor revuelo. El extremo marcó dos goles en la victoria por 4:3 sobre el Manchester City a finales de julio y dio otra asistencia. El entrenador Brendan Rodgers elogió después la asistencia como «mágica»
La carrera de Kühn, que empezó como aprendiz de mago en las categorías inferiores del Hannover 96, más tarde en el RB Leipzig y después en el Ajax de Amsterdam, podría alcanzar el siguiente nivel de madurez en Escocia. Kühn ha dado un paso adelante desde que se mudó del Rapid de Viena a Glasgow en enero. «Es muy divertido con esta calidad de compañeros», afirma Kühn, que, junto con los dos japoneses Daizen Maeda y Kyogo Furuhashi, suele formar la delantera de tres en el equipo de Rodgers.
Ser titular significa mucho para Kühn. «Siempre quise jugar al fútbol», y por eso eligió el Aue o el Rapid en lugar de fichar por un club más grande. «Nunca fue por el dinero o la fama. Renuncié deliberadamente a muchas cosas, quizá quería alejarme de esos grandes nombres».
Sin embargo, el telón del gran escenario aún no se ha abierto para él. Eso cambiará en cierta medida el martes por la noche: 80.000 espectadores en Dortmund, partido iluminado, himno de la Liga de Campeones. Aquí es donde Kühn puede llamar la atención. Para que Schlotterbeck, Groß y Brandt no se queden sólo en rivales
