Después de tres partidos sin ganar, el París Saint Germain se impuso por 4-0 en Montpellier. El trío ofensivo fue responsable de todos los goles.
Después de tres partidos sin ganar, el París Saint Germain, que jugó sin Neymar, quiso dejar las cosas claras desde el principio en su visita al Montpellier. En los primeros compases, las dos superestrellas de la ofensiva, Messi y Mbappé, fueron las protagonistas. Después de que el argentino fallara por primera vez tras una asistencia de su colega de ataque (5º), se mostró más frío apenas un minuto después – 1:0.
Sin embargo, los visitantes no se durmieron en los laureles y presionaron para conseguir un doblete. Sin embargo, Mbappé no logró batir al portero del Montpellier tras un buen remate de Messi (10º), por lo que el marcador se mantuvo por el momento en 1-0. Esto estuvo a punto de ser castigado: Donnarumma invitó a los locales a acercarse al gol por primera vez, pero el disparo de Mavididis se fue por la derecha (16º).
Messi y di Maria aportan la decisión anticipada
Messi y di María fueron más eficaces en el otro lado. En seis minutos, los argentinos se adelantaron en el marcador (20, 26). Ahora sólo faltaba Mbappé para el gol del trío ofensivo. En el minuto 33, el francés estuvo a punto de marcar, pero su disparo rebotó en el poste y volvió al campo. Por ello, el marcador se mantuvo en 3-0 hasta el descanso.
Tras la reanudación, el PSG bajó mucho el ritmo y el partido no se desarrolló. Sólo Mbappé estaba desesperado por marcar su 25º gol de la temporada. Marcó desde el punto de penalti (60º) después de que Souquet le derribara en el área. Como Mollet (64), Chotard (66) y Zambia (90) fallaron el gol de consolación en el curso posterior del partido, el marcador se mantuvo 0:4 hasta el final.
El
PSG, que hace tiempo que se proclamó campeón, recibe al FC Metz en la última jornada (sáb. 21:00). El Montpellier es huésped del Angers SCO al mismo tiempo.