En el primer partido tras la ampliación de contrato de Pep Guardiola, el Manchester City volvió a ser incapaz de poner fin a su crisis deportiva: El 4-0 encajado ante el Tottenham supuso su quinta derrota consecutiva. También se puso fin a una larga racha en casa
Manchester City llevaba 52 partidos oficiales sin perder en casa, en el Etihad Stadium, desde la derrota por 2-1 ante el Brentford el 12 de noviembre de 2022, en el último partido antes del Mundial de Qatar (¡!). Esa impresionante racha en casa llegó a su fin en una memorable noche de sábado contra el Tottenham. Los Spurs habían anunciado hace semanas la sequía sin precedentes del City en la Copa de la Liga bajo la dirección de Guardiola. En la duodécima jornada, infligieron una quinta derrota consecutiva a los campeones en serie
Haaland desaprovecha sus primeras ocasiones
En los primeros minutos del partido, antes de que Rodri, que seguía desaparecido, presentara su Balón de Oro en el círculo central, el City aún parecía un equipo con algo que recuperar. Y quién sabe cómo habría acabado la noche si Haaland hubiera aprovechado una de sus dos buenas ocasiones. Pero primero el noruego tardó demasiado en rematar tras una recepción descuidada del balón en el área (5ª, Davies desviado), y luego encontró a su maestro en el guardameta de los Spurs, Vicario, tras un gran trabajo preparatorio de Savinho (11ª, defensa con el pie).
Y de repente todo cambió. Tras una larga cabalgada desde su propio campo, Kulusevski se deshizo de Gvardiol con demasiada facilidad y elevó el balón desde el vértice derecho del área penal hacia Maddison, que remató desde unos metros para adelantar a los suyos (13º). Gvardiol volvió a desempeñar su papel en el hecho de que el internacional inglés, que se había quedado fuera del once inicial en dos ocasiones antes de la pausa internacional, pudiera doblar su cuenta en su 28º cumpleaños poco después. Esta vez fue incluso mayor.
El croata, sometido a presión en los primeros compases de la jugada, envió un desastroso pase erróneo directamente a Maddison en su propia área. El internacional inglés cedió a Son, que le sirvió el balón a la perfección. El remate con una vaselina fue ambicioso: 2:0 (20′). Pudo haber sido peor para los campeones, cuya defensa abrió enormes huecos: Ederson desvió el disparo de Son por encima del travesaño con la punta de los dedos (28′).
En el otro extremo, un descuido de Pedro Porro no tuvo consecuencias, ya que Savinho no logró controlar el balón tras una corta devolución de cabeza y Vicario -como tantas veces esta noche- estuvo atento (38′).
Un sobresaliente Kulusevski establece la decisión preliminar
Poco después de la reanudación, la siguiente derrota del City tomó forma: Kulusevski, fuerte como un oso, se abrió paso con facilidad por el centro del campo. No importó que su pase hacia Solanke fuera un toque demasiado ancho. El atacante cedió el balón a Pedro Porro, que remató para hacer el 3:0 (52′). No se oía nada en el estadio, salvo el bloque visitante.
Cualquiera que esperara que los pupilos de Guardiola opusieran resistencia se equivocaba. Ni siquiera un disparo de Haaland al larguero (60′) logró despertar a los locales, que siguieron mostrando una inusual falta de vida en ataque, y eso ante una defensa de los Spurs en la que faltaban jugadores clave como los lesionados Romero y van de Ven, así como el sancionado Betancur. De hecho, Ederson realizó una gran parada ante Kulusevski para evitar el cuarto gol (66′).
No fue hasta la entrada de Grealish y De Bruyne (demasiado tarde) en el minuto 74 cuando los esfuerzos del City empezaron a cobrar impulso. Sin embargo, Vicario estuvo atento para atajar un disparo de Gündogan (77′) y, poco después, otro de Haaland (80′), cuyo disparo fue magníficamente atajado con el brazo en alto
Werner marca tras entrar como suplente
Los Spurs completaron la humillación de los campeones en el tiempo añadido. Tras un espeluznante pase errado de Grealish, el suplente Werner encendió el turbo y centró hacia el segundo palo, donde Johnson se coló para hacer el 4-0 (90.+3).
Tras su quinta derrota consecutiva, el City corre el riesgo de perder pronto el pulso a la lucha por el título. Con una victoria en Southampton, el Liverpool FC podría ampliar a ocho puntos su ventaja al frente de la tabla. Y el próximo domingo, los campeones, que el martes reciben al Feyenoord en la Liga de Campeones, tendrán que jugar en Anfield Road el partido cumbre.