Danica Patrick cree que las carreras de la NASCAR son demasiado largas: los índices de audiencia televisiva de 2023 muestran un descenso en comparación con la temporada 2022
La Coca-Cola 600 en el Charlotte Motor Speedway es la carrera más larga del calendario de la NASCAR en términos de distancia. En la temporada 2023, el maratón de casi 1.000 kilómetros en Carolina del Norte duró casi cinco horas. Sin embargo, la carrera de Charlotte no es la única carrera de resistencia del calendario de la Cup Series, donde los espectadores tienen que sentarse regularmente frente al televisor durante más de tres horas para ver la acción. ¿Sigue teniendo futuro este formato en la actualidad?
A Danica Patrick, ex piloto de la NASCAR, le gustaría ver carreras mucho más cortas en la máxima categoría de la NASCAR, ya que «el comportamiento de consumo de los aficionados» ha cambiado con el tiempo. En declaraciones a Awful Announcing, la ex piloto de Stewart-Haas asegura que ha hablado con un alto cargo de la NASCAR para pedir carreras más cortas. «La gente tiene periodos de atención más cortos», argumenta la estadounidense.
Pero, ¿qué dicen las cifras? El boom de la NASCAR de los años 90 y 2000 ha terminado, pero el automovilismo tiene problemas de audiencia en todo el mundo, y la serie de stock cars no está sola. En comparación con el año anterior, las cifras de audiencia cayeron en un porcentaje de un solo dígito, dependiendo de la carrera. Una sorpresa positiva, sin embargo, fue la carrera callejera de Chicago, que aportó a la NBC sus mejores cifras de audiencia desde 2017.
¿Cómo están reaccionando los aficionados a nivel local?
Por otro lado, se puede ver una tendencia diferente directamente en la pista de carreras, ya que muchas sedes registraron sus mejores cifras de audiencia en años. Según el Presidente de la NASCAR, Steve Pelphs, este año la serie ha vendido un 50% más de entradas para las carreras que el año pasado. Estos aficionados acuden a los circuitos para ver los coches y los pilotos en la pista, pero ¿seguirán comprando entradas si la acción in situ se reduce drásticamente?
Si se acortaran las carreras de la Cup, también se verían afectadas las de Xfinity y Truck, ya que tienen una distancia significativamente menor que las de la primera división. A nivel local, el acortamiento de las carreras significaría que el programa de apoyo también disminuiría, por lo que la NASCAR tendría que recuperar ese tiempo con otras series de carreras, carreras espectáculo o sesiones de entrenamientos adicionales. Además, los aficionados de la NASCAR no son los más innovadores del automovilismo, por lo que suelen reaccionar con mucha sensibilidad a los cambios.
Clásicos como la Daytona 500, la Geico 500 en Talladega, la Southern 500 en Darlington y la mencionada Coca Cola 600 en Charlotte son joyas de la corona que la NASCAR sólo puede tocar con cuidado. Pero también hay innumerables carreras en las que bastarían entre 200 y 300 millas en lugar de 400. Entre ellas están Pocono, Michigan, Dover y los numerosos óvalos de 1,5 millas del calendario. «Pedir a los aficionados que se sienten delante de la tele durante cinco o seis horas es demasiado», dice Patrick.
¿Necesitas formatos innovadores?
NASCAR incluso se atrevió a experimentar durante la pandemia y organizó una carrera doble en Pocono. Un formato como éste para circuitos seleccionados, con dos carreras cortas el sábado y el domingo, podría ser también una forma de hacer frente a los estragos de la meteorología y flexibilizar el calendario, sobre todo teniendo en cuenta que la NASCAR choca con el deporte número uno en Estados Unidos, el fútbol americano, al final de la temporada con la NFL.
Pero la NASCAR no es la única serie puntera del mundo que tiene problemas. Mientras que las carreras de resistencia en Estados Unidos ocupan demasiado tiempo, la Fórmula 1, en lo más alto de la clasificación, se caracteriza por el puro aburrimiento. Red Bull y Max Verstappen dominan la acción, lo que también se refleja en las audiencias, que han bajado respecto a años anteriores. En Estados Unidos, sin embargo, hay una serie que ha conseguido mejorar sus audiencias: IndyCar. En la temporada 2023, sintonizaron un dos por ciento más de aficionados que el año anterior, pero cuando se decidió el campeonato, las cosas también fueron cuesta abajo aquí
Todos los deportes tienen sus altibajos», dice Patrick. «La Fórmula 1 está en alza, pero la NASCAR tiene sus problemillas. La Fórmula 1 no solía estar en el radar en Estados Unidos, y los pilotos de la NASCAR eran los más importantes. Eso tiene mucho que ver con el producto, pero también con la comerciabilidad de los pilotos y sus personalidades.»
Una nueva generación necesita tiempo
Patrick alude a las salidas de grandes nombres como Jeff Gordon, Dale Earnhardt Jr, Tony Stewart y ahora Kevin Harvick. En la final de 2023, ganada por Ryan Blaney, se registró la media de edad más baja desde la introducción de los playoffs, en torno a los 28 años. Se está produciendo un cambio generacional, pero siempre ha habido este cambio de guardia e incluso las leyendas de hoy en día no fueron aceptadas inmediatamente por los aficionados de toda la vida en sus inicios.
Según Patrick, hay una ola de popularidad en todas las series de automovilismo y la serie se beneficiaría de los valles de los demás campeonatos. Phelps, presidente de la NASCAR, defendió recientemente el formato de los playoffs, que algunos aficionados consideran demasiado espectáculo. Tampoco ve motivos para esconderse de la Fórmula 1, y afirma que los diferentes circuitos y formatos de la NASCAR hacen que el año sea emocionante, con 36 carreras puntuables y dos invitacionales.