Continúa la tendencia positiva en el FC Barcelona: La victoria por la mínima ante Las Palmas (1-0) significó el cuarto triunfo consecutivo de los catalanes en competición oficial. A pesar de estar en inferioridad numérica durante 65 minutos, fue necesario un momento brillante del comodín Joao Félix para embolsar su 20ª victoria liguera
El FC Barcelona se mantiene invicto por undécimo partido oficial consecutivo, y la victoria por 1-0 fue la cuarta consecutiva. Al 1-0 contra el Mallorca le siguieron victorias convincentes contra el Nápoles (3-1) y el Atlético (3-0) para pasar a cuartos de final de la Liga de Campeones. Sin embargo, sin Xavi, que estaba sancionado, la ofensiva del Barcelona funcionó a fuego lento.
El Barcelona empezó animado, con el balón en la red a los cinco minutos, pero Lewandowski estaba en fuera de juego antes de marcar. Al cuarto de hora, el polaco también puso a prueba por primera vez al guardameta Vallés (16′), que se centraría poco después. El balón volvió a entrar en la portería poco después, pero el árbitro Mateo Busquets Ferrer había vuelto a reconocer una posición de fuera de juego -al goleador Raphinha (pasivamente en fuera de juego) le costó vivir con esta controvertida decisión (19′).
Valles saca a Raphinha de sus pies
Valles y Raphinha se vieron las caras cuando el guardameta visitante se precipitó fuera de su área tras un pase alto y sacó al brasileño de los pies. La tarjeta roja resultante también le costó el partido al retornado Munir, que tuvo que dejar paso al portero suplente Aaron (24′).
El Barcelona dispuso de dos buenas ocasiones para adelantarse antes del descanso, pero Lewandowski sólo golpeó el travesaño con el hombro y Raphinha disparó desviado a la derecha (34′, 45′). Coco tuvo la mejor oportunidad de los visitantes segundos antes del final de la primera parte, con un lanzamiento de falta que se estrelló en el exterior de la red (45,+3).
Tras el paso por los vestuarios, el partido se volvió un tanto flojo antes de que la primera sustitución del Barcelona cambiara la estática del encuentro: Joao Félix, que sólo llevaba tres minutos sobre el terreno de juego, elevó brillantemente el balón de la nada hacia Raphinha, que cabeceó por encima de Aaron para hacer el 1:0 (59′).
Joao Felix remata al larguero desde cuatro metros
En la última media hora, el partido estaba un poco estancado antes de que Gündogan jugase un perfecto pase en profundidad a Koundé, que encontró a Joao Felix en el área. Sin embargo, éste logró la proeza de estrellar el balón contra el travesaño desde cuatro metros, desde donde rebotó en Aarón, el poste y luego fuera de juego (78′).
El Barcelona estuvo incluso a punto de regalar la victoria, pero Moleiro sólo remató al exterior de la red tras una buena carrera en solitario – ter Stegen regañó a sus compañeros como un gorrión de corral (87′). Al final, victoria merecida, aunque poco vistosa, por 1-0 para los locales, que subrayan su condición de máximo rival del Real Madrid.
El próximo partido del equipo de Xavi no será hasta el 10 de abril, cuando se enfrente al París Saint-Germain en la ida de cuartos de final de la Liga de Campeones.