Atakan Karazor está acusado de violación y está detenido en Ibiza. ¿Qué le espera al centrocampista del Stuttgart?
Junto con un amigo, también de 25 años, el profesional del VfB habría violado a una joven el pasado miércoles durante sus vacaciones en la festiva isla de Ibiza. Así lo informaron varios medios de comunicación en referencia a la denuncia de la mujer de 18 años, que acudió a un hospital para ser examinada tras el crimen. El tradicional club sigue de cerca los acontecimientos. La declaración pública ha sido hasta ahora breve. Se aplica la presunción de inocencia y están «en contacto permanente» con los abogados del jugador, que «niega cualquier delito». No se puede decir más en este momento.
Una espada de Damocles pende sobre la carrera de Karazor. Justo cuando parece que está despegando en el VfB. En la segunda mitad de la temporada, Karazor había pasado de ser un jugador complementario a ser una pieza clave e incluso se convirtió en el centro de atención de la selección turca. Tras el cambio de sistema a una línea de cuatro hombres en la retaguardia y de seis en la defensa, Karazor se había convertido en un factor importante como interceptor por delante de la retaguardia en la lucha contra la amenaza del descenso. El jugador de 25 años consideró que el descenso logrado fue el punto culminante de su carrera hasta el momento, que ahora podría verse gravemente dañada. Karazor se enfrenta a consecuencias de gran alcance, especialmente porque las leyes españolas sobre delitos sexuales no se endurecieron hasta mayo.
«Si se confirma la sospecha de violación, existe la posibilidad de una larga condena de prisión», explica Ingo Bott, del conocido bufete de abogados Plan A. En vista de las muchas preguntas sin respuesta, es imposible decir con seguridad cuánto tiempo. Varios medios de comunicación informan de una posible puesta en libertad el lunes. Sin embargo, es más probable que la estancia sea más larga. «Eso no sólo es posible, sino probable», dice el abogado de Düsseldorf, especializado en derecho penal. La socia de cooperación española de Botts con sede en Mallorca, la abogada María Barbancho, explica el procedimiento en su país de origen: «Especialmente en Baleares, la prisión preventiva suele durar al menos seis meses».
Esto significa que el jugador nacido en Essen, que creció en los equipos secundarios del VfL Bochum y del Borussia de Dortmund antes de fichar por el VfB Stuttgart a través del Holstein Kiel en el verano de 2019, quedaría fuera de la carrera como jugador por el momento. Es dudoso que el profesional, que jugó 23 partidos de segunda división y 43 de la Bundesliga con el VfB en tres temporadas, pueda incorporarse a la preparación de la nueva temporada el 25 de junio, que comienza con las primeras pruebas de rendimiento. «El indulto sólo es posible de forma realista si el jugador cumple con los estrictos requisitos de información», explican Bott y Barbancho. Sin embargo, el jugador no tiene que estar en Ibiza o en España para hacerlo. «También puede cumplir estos requisitos en el consulado español de Stuttgart.