No todos en el paddock de la Fórmula 1 creen que el límite presupuestario pueda controlarse de forma fiable – el jefe de la escudería McLaren, Andreas Seidl, no ve problemas
En la temporada 2021 se produjo una novedad en la Fórmula 1. Por primera vez, todos los equipos de la categoría reina estaban obligados a respetar un tope presupuestario. El año pasado, las escuderías pudieron gastar un máximo de 145 millones de dólares estadounidenses, pero con numerosas excepciones y algunos puntos conflictivos.
Entre otras cosas, actualmente hay un debate sobre si las carreras de velocidad adicionales en 2022 deben dar lugar a un tope presupuestario más alto. Otros grandes interrogantes son la forma de sancionar las infracciones en el futuro y si el control de la FIA sobre las complejas normas funcionará.
«Si el tope presupuestario se puede controlar de forma segura e igual para todos, no tengo ningún problema. Pero todavía veo algunas zonas grises, y eso me preocupa», dijo, por ejemplo, Adrian Newey, de Red Bull, en una entrevista con ‘auto motor und sport’ el año pasado.
«Estoy muy contento con todo el proceso», aclara sin embargo el jefe del equipo McLaren, Andreas Seidl. No ve «ninguna bandera roja», es decir, ninguna posibilidad de que los equipos eludan el reglamento. También con respecto a las sanciones, declara: «Tengo plena confianza en el sistema y en la FIA».
Antecedentes: Ya el año pasado, varios equipos se manifestaron en contra de las sanciones deportivas por incumplimiento del nuevo reglamento financiero de la Fórmula 1. Esto significa que las infracciones podrían castigarse con multas, por ejemplo, pero no con deducciones de puntos o incluso con la exclusión del Campeonato del Mundo.
Seidl explica que supone que habrá el «castigo adecuado» para los delitos apropiados, sea cual sea. «No es ningún secreto que somos grandes defensores de estas normas», recuerda Seidl sobre la postura de McLaren ante el límite presupuestario en la Fórmula 1.
Y después del primer año, parece que están satisfechos en Woking. En cualquier caso, Seidl está «muy, muy seguro» de que la nueva normativa igualará las condiciones «en términos de presupuesto». A cambio, ahora hay de nuevo algunos puntos de discordia …
